En tiempo de pandemia. Madres y padres se comprometen en la educación de sus hijas e hijos

La estrategia virtual “Aprendo en casa” que implementa el Ministerio de Educación, durante la pandemia del Covid-19, ha dado la oportunidad de promover aprendizajes desde la casa. En esta circunstancia, un 99 % de niñas y niños de la ciudad están recibiendo clases en forma virtual por televisión, radio o internet en mejores condiciones en comparación con estudiantes de escuelas rurales que aún tienen dificultades para acceder a clases.

En la zona rural muchas familias no cuentan con un radio receptor, televisión o celular; y por otro lado, algunas madres y padres de familia no están preparados para apoyar a sus hijas e hijos en los procesos educativos.

De acuerdo a algunos testimonios de madres y padres de familia, con quienes trabajamos en las zonas rurales, las clases virtuales no llenan sus expectativas, se desarrollan muy rápido, usan palabras nuevas, y en el caso de secundaria es dirigido en castellano mientras sus hijas e hijos tienen como lengua materna el quechua.

Sostienen que en el caso de los más pequeños no comprenden las clases que se transmiten por la radio pues es solo oral y no cuentan con imágenes y otros recursos que le ayude a una mejor comprensión. A ello se suma que algunas madres no saben leer ni escribir y en consecuencia sus hijas e hijos tienen que pedir apoyo a sus vecinos para desarrollar sus tareas, incluso prestarse el celular para enviar por “WhatsApp” las tareas.

¿Y qué piensan los estudiantes? De acuerdo a los testimonios recogidos, este proceso de aprendizaje virtual es totalmente nuevo para ellos, y vienen adecuándose con dificultad, muchas veces no entienden bien las clases. Para ellos no se comparan con las clases presenciales. Afirman que cuando tenían dudas o querían opinar, acudían sin miedo al docente, había diálogo y retroalimentación en el aprendizaje.

Con mucha tristeza, manifiestan, que quieren volver a la escuela, que extrañan mucho a sus compañeras y compañeros de clase, así como a sus docentes, y añoran los buenos momentos que compartían en la escuela, los juegos y las risas.

El contexto no es nada fácil para estudiantes, docentes, madres y padres de familia, nos enfrentamos con muchas limitaciones, no solamente a una nueva forma de educación, sino al temor e incertidumbre que causa la propia pandemia, especialmente en el ámbito rural donde la presencia del estado es deficiente. Frente a esta situación Tarea viene promoviendo y apoyando diversas acciones con instituciones educativas de Cangallo y Huamanga a fin de implementar algunas estrategias para reforzar el aprendizaje de sus estudiantes en casa.

Las estrategias tienen en cuenta la realidad y contexto de las y los estudiantes:

  1. Directoras y directores entregaron los cuadernos de trabajo de las diferentes áreas curriculares de cada ciclo y los libros “Castellaneando”, para garantizar que todas y todos sus estudiantes los reciban, Tarea ha colaborado con el Ministerio de Educación en Cangallo y Huamanga para que las escuelas en las que trabaja, cuenten con ese material educativo.
  2. Para fomentar en casa el gusto por la lectura, directoras, directores y docentes de las instituciones educativas focalizadas, están entregando libros de las “biblioteca de aula”, implementadas hace tres años, en coordinación con integrantes de la Asociación de Madres y Padres de Familia (AMAPAFA) y otros aliados. La entrega del material de lectura se realiza respetando el protocolo de seguridad frente a la emergencia por el Covid-19. Para las entregas se utilizan registros de salida y se cuenta con el compromiso de las familias de cuidarlos y que sus hijas e hijos y reportaran a sus profesores sobre los libros leídos.

Gracias al esfuerzo conjunto de la comunidad educativa se ha logrado entregar 138 libros, en 5 escuelas de Cangallo: Yuraq Yuraq, Canchacancha y Anchaq Wasi en Huamanga y en Chuschi y Quispillaqta.

Durante las últimas semanas estamos sumando compromisos y haciendo esfuerzos para garantizar que niñas y niños sigan fortaleciendo el placer por la lectura, así como sus aprendizajes en casa. (Nelson Alejandro Rimache, educador de Tarea en Ayacucho)