Martín Vizcarra: Un discurso para retomar el liderazgo
Foto: La República
El discurso del presidente Martin Vizcarra busco sintonizar con el descontento ciudadano, que se expresó en las calles. Cientos de peruanas y peruanos se movilizaron por las principales calles de Lima y provincia para protestar contra la corrupción del Poder Judicial, incluso en vísperas del 28 de julio, Día de la Independencia Nacional, se escucharon voces exigiendo “que se vayan todos”.
El presidente en su discurso recoloco la agenda social y política en busca de una salida en el campo de la institucionalidad, convocará a un referéndum para poner en consulta el regreso a la bicameralidad (cámara de diputados y senadores) en el Congreso, la no reelección de congresistas, el financiamiento privado de los partidos políticos y las campañas electorales y, la reforma del Consejo Nacional de la Magistratura, esta última iniciativa implicará una reforma constitucional.
Fue un discurso con iniciativa orientado a dar salida a los actos de corrupción en el Poder Judicial que han indignado a la ciudadanía. Los seis proyectos de Ley que el ejecutivo presentará al Congreso se refieren a un mayor control de la Fiscalía y el Poder Judicial, reforma que se orientará a transparentar el Sistema de Justicia y establecer sanciones a abogados corruptos.
Otro aspecto a resaltar en el discurso tiene que ver con la violencia contra la mujer, el presidente Vizcarra reconoció que una de sus causas es la ausencia de políticas públicas con enfoque de género, comprometiéndose a destinar más recursos, para prevenir, dar atención y protección. En esta perspectiva urge que el Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables convoque a la sociedad civil y a los representantes de los ministerios de Educación, Salud, Justicia, Interior, Trabajo y Promoción del Empleo, Economía y Finanzas, entre otros, para elaborar el nuevo Plan Nacional de Igualdad de oportunidades que el año pasado culmino su periodo, su vigencia fue de 2012 al 2017.
Otro de los temas abordados fue la descentralización, lamentablemente solo se refirió a la transferencia de recursos a los gobiernos regionales y locales, que prioriza los sectores de transporte, comunicaciones, saneamiento, salud, agricultura y educación. Si bien la transferencia de recursos es muy importante; también lo es el fortalecimiento de las regiones y los gobiernos locales en el campo de la gobernanza. Es necesario avanzar en la implementación de una matriz de funciones y competencias en los tres niveles de gobierno: nacional, regional y local.
Los derechos de los pueblos indígenas, fue otro tema abordado en el discurso presidencial, reconoció que somos un país multilingüe y pluricultural, que tiene identificados 55 pueblos indígenas y 47 lenguas indígenas y originarias. Por primera vez, un mandatario destaca el interés del ejecutivo de fortalecer los derechos de los pueblos indígenas y de la población afroperuana. Además, anunció el lanzamiento del “sello intercultural” que asegurará estándares de calidad en los servicios públicos para que cumplan con criterios pertinentes a las diversas realidades lingüísticas y socio culturales de la población. Comunicó que en el mes de diciembre se aprobará la Ley contra el racismo y toda forma de discriminación étnico racial.
En educación fue muy breve, se comprometió a mantener la política de la meritocracia en el ejercicio docente, transferir fondos a los gobiernos regionales y locales para concluir la ejecución de 2000 escuela, también se comprometió a dar continuidad al proceso de licenciamiento y la reforma universitaria.
En educación el presidente Vizcarra, perdió la oportunidad de vincular educación con formación ciudadana y lucha contra la corrupción. La escuela no debe ponerse de espalda al contexto político, a la realidad nacional, necesitamos una escuela que aprenda a promover un pensamiento crítico haciendo de los hechos sociales del país una oportunidad de aprendizaje, urge vincular la escuela con la comunidad.
Escribe: José Luis Carbajo, miembro del Comité Directivo, TAREA
