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Lima, 27 de octubre del 2005

Año 4, Nº 43

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Afirma Elizabeth Evans, directora de EDUCA

Proyecto Educativo Nacional: como sueño me entusiasma

Elizabeth Evans, directora de EDUCA

Hacia un Proyecto Educativo Nacional 2006-2021, es la propuesta que el Consejo Nacional de Educación presentó al debate. Sobre esta propuesta Tareainforma conversó con Elizabeth Evans, directora de EDUCA Instituto de Fomento de una Educación de Calidad, institución comprometida con la educación desde hace 14 años.
Para Betty, como familiarmente se la conoce, Hacia un Proyecto Educativo Nacional 2006-2021, “es una utopía, es algo no alcanzable”. Lo que más le preocupa de la propuesta es que “parta de sueños”, los cuales incluso, “estarían más acordes a realidades de países desarrollados”.
Exhorta a políticos, intelectuales y a todos en general a pensar en qué tipo de país queremos y sugiere se invite a los docentes a debatir el proyecto, de lo contrario corre el riesgo de convertirse en la propuesta de una élite.

- ¿Qué le sugiere la propuesta de Proyecto Educativo Nacional?

- ¿Por que siente eso?

Estos docentes han venido manifestando a través de proyectos de innovación en sus escuelas, un liderazgo muy, muy positivo. Han venido esforzándose contra corriente, en un esfuerzo por transformar su aula, su escuela, por hacer planteamientos más a nivel local, regional, pero no les brindamos los canales necesarios para que estos docentes se expresen, se organicen y aporten en el planteamiento de una propuesta y de un proyecto de educación nacional. Y aquí creo si bien tenemos una tarea, no somos los únicos: Tarea, Fe y Alegría, Educa, Foro Educativo, tenemos contacto con estas redes educativas, junto con sectores en el Ministerio de Educación. Hemos tenido una experiencia de cinco años de foros nacionales de experiencias educativas y los docentes han demostrado no solamente su capacidad de innovar sino su capacidad de aportar en la reflexión sobre lo que es una innovación educativa y cómo se forman las redes de maestros innovadores, cómo son los promotores de la innovación educativa. Los tenemos en diferentes zonas del país. Estos docentes son los llamados, pero también deberían de ser los escogidos por el Consejo Nacional de Educación para que se expresen pronto en esto, pero con el apoyo de todos los sectores del Ministerio de Educación, porque creo que cuando hablo de que están trabajando contra corriente, están contra corriente las instancias intermedias y las diferentes unidades del Ministerio que no reconocen lo que es ser un maestro en nuestro país, un maestro en las zonas rurales, en las zonas alejadas, en el sector marginal, trabajar sin materiales, trabajar sin condiciones con un salario miserable, esto no es reconocido.

-¿Por qué este divorcio? ¿Por qué no se recogen estas experiencias?

Tenemos un discurso de revalorar la carrera docente, pero nos quedamos en el discurso, no sabemos absorberlo. Cuántos docentes que trabajan y que están haciendo experiencia, están en el Consejo Nacional de Educación; cuántos están en los eventos. No tenemos instancias. Esto se da a nivel de distrito, de las redes donde ellos se expresan. Nosotros en Educa, como docentes que somos, algunos jubilados, otros ya cesantes del magisterio, permanecemos en esta trinchera de aportar al trabajo mismo del docente, porque sabemos lo que representa. Pero hay sectores que no han pasado por el aula que están en puestos de decisiones de política, y también de consultarías que no conocen esa realidad tan dura del docente, y hablan como si conocieran.

- Y qué faltaría para que esta élite, como usted dice, se aterrice.

Hay que hacer un esfuerzo muy grande, con los sectores a los que me estoy refiriendo: maestros a todo lo largo y ancho del país que están comprometidos con la educación, saber qué dicen, qué piensan; hay que entrar también en diálogo con ellos y con sus comunidades educativas, creo que estos maestros tienen liderazgo en sus comunidades educativas, los padres de familia los respetan. Estos compromisos recíprocos tienen que venir de los maestros buenos que junto con los padres de familia establecen alianzas y plantean cómo mejorar las posibilidades de vida de sus hijos y sus alumnos. Es otra forma de tratar la comunicación, el país no se está comunicando, no se está enterando. No es solamente en el tema educación, en el tema de la descentralización ¿no están preocupados porque el pueblo no sabe que va a ir a un referéndum? Ese es nuestro Perú, un país disgregado, que no está entrando en una misma onda, en una misma visión de país. A mi me da pena, porque tenemos una serie de documentos en educación que uno diría ya estamos listos para dar el salto. Tenemos este Proyecto Educativo Nacional; el Plan de EPT; el Programa Nacional de Emergencia Educativa –un programa interesante pero sin recursos-; tenemos la Ley General de Educación que plantea cosas con las cuales estamos totalmente de acuerdo y que tratamos también de llevarla adelante en las zonas donde trabajamos; el reglamento de la ley –o sea que tampoco nos podemos quejar porque no existe eso-; tenemos la propuesta del proyecto de ley de carrera docente que también está en debate pero que es otro diálogo de sordos; la ley del FONDEP y su reglamento –que eso sería un gancho muy interesante para promover las innovaciones, pero es una ley que, acabo de escuchar, el ministro no sabe ni que existe-; tenemos el Pacto Social de Compromiso Recíproco que yo lo rechazo abiertamente porque no sé dónde se ha hecho ni con quién, me consta que los maestros no lo conocen ni se sienten aludidos por este pacto; tenemos en Acuerdo Nacional, aparentemente toda la clase política está de acuerdo en que la educación es prioritaria; tenemos el Plan Nacional de Educación por la Infancia; tenemos un gran informe de la Comisión de la Verdad y Reconciliación que nos habla de muchos aspectos que este Proyecto Educativo Nacional toma en cuenta como es la exclusión, la marginación y todo lo que tenemos que revertir en cuanto a la mirada de un nuevo tipo de educación, la incorporación de sectores que han venido por décadas siendo marginados. Creo que ya no nos debemos preocupar por más documentos. Ahora es, cómo nos comunicamos con la gente, con el pueblo sencillo, para que entienda estas propuestas. No podemos ir con un mensaje de promesas, tenemos que ir viendo qué nos corresponde a cada sector, para ir identificándonos con algo que hacer: maestros, padres de familia, sectores que conducen, deciden políticas, las diferentes instancias. Un rol importantísimo es el de directores de centros educativos, que es otra preocupación, porque ahora hay otro concurso para directores y me estoy enterando todas las cosas que están pasando en los centros educativos en donde se presentan personas que no son idóneas. Entonces ¡esas cosas hay que pensarlas ya!, o sea, está bien pensar en el 2021, pero quisiera que se ponga la vista en qué cosas tienen que cambiar ya.

- La propuesta está proyectada hasta el 2021

Eso significa que los docentes que se están formando hoy día, van a tener 16 años de trabajo. Entonces de quiénes estamos hablando qué vamos a formar para que el 2021 llegue a ser un hito en la historia, un punto de quiebre en la educación del país. Tendríamos que haber comenzado a cambiar radicalmente la formación del docente, para decir de aquí a 16 años vamos a tener cambios, pero minúsculos, porque van a ser pocos todavía, porque muchos docentes van a quedar todavía en el sistema. Entonces ¿estamos conscientes de lo que significa para el 2021 tener todo este ideal de educación? ¿Estamos hablando también de presupuesto? Este debe ser mucho más del seis por ciento del producto bruto interno si queremos cambiar la infraestructura de la escuela, la atención a los alumnos en zonas rurales, si queremos cambiar la formación del docente, la formación permanente del maestro en servicio. Estamos hablando de un Ministerio de Educación y de sectores intermedios en gobiernos regionales que apoyan y que entienden la educación. Estamos hablando de cosas mayores, que no sé si un grupo élite de educación puede cambiarlo, porque la resistencia es muy fuerte; la resistencia viene del propio Ministerio, de los políticos que no entienden esta propuesta. Van a pasar varios gobiernos por lo tanto. Dónde están esos sectores políticos que se van a comprar este pleito, no he escuchado todavía a ninguno que tenga algo, por supuesto, recién está comenzando el debate, pero las coincidencias no van por acá. Ellos quieren cambiar, hacer una pequeña reforma, incluso en los planteamientos así lo plantean, esto es un cambio radical, de raíz, del sistema educativo.

- Qué falta para gestar acciones movilizadoras, ya no teoría, nadie se opone a muchos de los documentos que existen ¿Cómo hacer para que éstos movilicen a los sectores sociales, a los sectores políticos, que todos digan sí, yo tengo que hacer, me tengo que comprometer y lo asuman responsabilidades?

Tenemos que establecer vasos comunicantes con los sectores que son claves de la sociedad, pero hay que darles las condiciones. Estos maestros de los cuales hablo -no soy voz única en el desierto, estoy segura que Tarea también tiene este problema- son nuestros mejores docentes que se agotan en el esfuerzo porque las instancias intermedias no los apoyan, porque se hace una serie de innovaciones y el Ministerio no las toma en cuenta. Hay que empezar a mirar de cerca quiénes están trabajando bien y cómo lo destacamos, cómo trabajamos ya no de arriba para abajo, sino más bien de abajo para arriba. Y de abajo al conjunto. Ya no más gente que sale de las diferentes instancias del Ministerio a decirles qué tienen que hacer. Hay que promover foros de discusión a nivel de docentes, invitando a que ellos mismos los organicen, los programen, que la gente se conozca, que los maestros visiten unas experiencias y otras. Son las cosas que Educa y Tarea venimos haciendo hace tiempo a pequeña escala. El Ministerio debería mover sus recursos para motivar estas acciones y buscar en qué creen los docentes que deben ser capacitados. Que no se les vea como personas menores de edad a los cuales hay que darles todo, o darles lo que es bueno para ellos. Cuándo vamos a tratar a los directores como verdaderos gerentes de sus instituciones. También hay muchos casos en que los docentes son líderes, pero si hay un enfrentamiento con los padres de familia por cualquier motivo, las autoridades retiran al director y dan la razón a los padres de familia para evitarse problemas. Necesitamos más comprensión sobre cómo se resuelven y cómo se tratan los conflictos, no ir como autoridad a decidir por encima de todos.

- ¿Qué va a pasar en futuro cercano si mantenemos esta práctica de la teorización y de las políticas a largo plazo divorciadas de la vida real?

Alguna gente dice que ya hemos tocado fondo en la educación. Si es así y realmente lo creemos, tenemos que hacer algo muy drástico para cambiarlo, pero no se ven las voluntades que quieran hacerlo, hay gente que todavía no le preocupa, no le interesa la escuela pública, finalmente no le interesa el país y su desarrollo.

- De alguna manera las cosas suelen beneficiar a alguien. Cuando no te movilizas, no haces, es porque de alguna manera o ganas o no te afecta. Pareciera que hay un sector que tiene resuelta la educación de sus hijos, lo otro le da pena, pero qué se va a hacer. No hay un sinceramiento incluso de los sentimientos.

Totalmente de acuerdo. Y creo que esto pasa porque el presupuesto nacional es tan irrisorio para esta educación que todo el mundo se da cuenta. Entonces si puedes tienes a tus hijos en la escuela privada, aunque sea un desastre la escuela privada porque también hay escuelas privadas y privadas. La gente no cree en la escuela pública, en zonas urbano marginales hay más escuelas privadas que escuelas públicas. Eso pasa en San Juan de Lurigancho, donde hay el doble de colegios particulares. Los docentes también dicen que sus hijos están en la escuela privada. Todos quisiéramos creer en la escuela pública, pero no creemos en ella. Eso es contracorriente totalmente porque estamos simplemente entreteniendo. Los maestros son como niñeros, o sea los pongo porque no tengo qué hacer con mis hijos y allí me los cuidarán por unas horas. Pero no porque van a formar a mis hijos. Hay excepciones, hay colegios muy buenos, hay que hacer que se difundan las experiencias de las buenas escuelas públicas. Siento que si el Plan de Emergencia hubiera ido por allí, seleccionar las mejores escuelas con los mejores maestros y realmente a partir de ellos hacer propuestas. Pero no vemos que el Ministerio brinde apoyo. Los maestros no son capaces –se piensa- de llevar adelante sus propias propuestas de cambio y de mejora. No se cree en el docente.

- Si los profesores tienen a su hija, hijo en un particular es porque no confían en sus colegas.

Tampoco es bueno que un docente lo tenga en su propia escuela. Deberían sí poder ponerlo en una escuela del barrio donde vive, de la zona donde vive y creer que efectivamente que el gobierno, su gobierno, está haciendo algo para que estos chicos salgan adelante. Creo que la clase dirigencial, la clase política de nuestro país cree que con solamente formar a sus propios hijos, aunque ellos se vayan después fuera del Perú, están resolviendo el problema del país. Están resolviendo su problema personal. No hay una visión de conjunto, de nación, de lo que pasa con los demás me afecta a mi, de que si las personas, los jóvenes van a poder tener una educación crítica, más creadora, mucho más analítica, van a poder ofrecer soluciones a este país. Necesitamos desarrollar este país, y para eso se necesita la educación, no hay otro camino. Mi crítica no es solamente a este sector de élite de la educación, mi crítica es a los dirigentes políticos que no tienen una visión de país donde el desarrollo pasa por la educación. Soy super optimista por lo general, tengo muchas reservas de optimismo por el trabajo que hago, pero la gran cantidad de documentos que han sido expuestos, a mi me abruman porque comparo eso con la realidad. Y no lo puedo evitar porque nosotros estamos en contacto con los docentes día a día y vemos las cosas que están sucediendo en las escuelas, en los programas. Estamos llevando un programa de alfabetización en San Juan de Lurigancho con dos mil mujeres, mujeres en su mayoría, gente desplazada de las zonas de emergencia, gente que ha sido postergada por tanto tiempo y castigada prácticamente sin tener culpa de nada. Y ahora viéndolos en estos programas quisiera que esta gente también tenga posibilidad de un futuro en este país. Y que se sientan capaces y que sientan que se les ofrece oportunidades, esto de la equidad es sumamente importante. Pero la equidad no se escribe en un papel, la equidad se practica, se pone en juego, día a día. Yo siento que obviamente estos documentos son importantes en la medida que abren el diálogo pero busquemos otro tipo de diálogo, busquemos otro tipo de relación con aquellos sectores a los cuales queremos beneficiar. El documento habla por los sectores postergados, marginados, excluidos de la sociedad. Me parece bien, pero creo que los sin voz ya deberían tener voz.

- Los sin voz a veces hablan… los sindicatos dicen hablar por ellos.
Dicen hablar por ellos, estoy de acuerdo, pero no son ellos. Yo creo que al menos hoy en día el sindicato, el Sutep, ya no representa a la gran mayoría de maestros y no representa a los maestros que están en el aula comprometidos con los cambios. También creo que hay que ser muy firmes frente a esto, se necesita otro tipo de interlocutor para expresar las ideas, las preocupaciones y toda la motivación que tiene el docente. (Julia Vicuña Yacarine, periodista, Tarea).

Tarea Ayacucho